PARTE I
Cada persona tiene derecho a elegir el método anticonceptivo que más se ajuste a sus necesidades, estilo de vida, vida sexual, número de hijos que desea tener, valores, religión, situación socioeconómica, etcétera; siempre tomando en cuenta las características de cada método anticonceptivo y las condiciones de salud que se puedan ver afectadas por el uso de uno u otro método como presión alta, tabaquismo, enfermedades del corazón, infecciones genitales, entre otras.
Para poder tomar la mejor decisión es importante conocer todas las opciones que existen en el mercado, comprender muy bien cómo funciona cada método y sobre todo saber cuál nos ofrece la mayor protección.
Antes de adentrarnos en las especificaciones de cada método, es necesario que comprendamos ciertos conceptos acerca de la calidad de los anticonceptivos:
Eficacia: Es la capacidad que tiene, el método anticonceptivo, para evitar un embarazo y depende, en gran medida, del correcto uso del método.
Seguridad: Es la propiedad de los anticonceptivos, que hace referencia a la ausencia de peligro, daño o riesgo. Algunas condiciones de salud pueden ser contraindicación para el uso de ciertos métodos anticonceptivos. En la mayoría de los casos los pacientes jóvenes son sanos y el uso de los anticonceptivos no representa ningún riesgo.
Aceptabilidad: Es el conjunto de cualidades, de un anticonceptivo, que lo hace aceptable o no para cada persona. Cada método anticonceptivo tiene una forma de actuar diferente y lo que para una persona puede ser algo positivo o adecuado a su forma de pensar; para otro puede ser una desventaja o simplemente ir en contra de sus creencias.
Facilidad de uso: Mientras más sencilla sea la forma de uso; es más fácil que el método se use de manera adecuada.
Reversibilidad: Es la capacidad de poder quedar embarazada después de suspender el uso del anticonceptivo.
Una vez aclarados esos términos hablaremos de lleno acerca de las opciones anticonceptivas que existen.
Los métodos anticonceptivos se dividen en 2 grandes grupos:
· Métodos no reversibles o definitivos
· Métodos reversibles
Métodos No reversibles (definitivos):
Ligadura tubárica: procedimiento quirúrgico que consiste en ocluir las trompas de Falopio, con una ligadura, con el fin de impedir la unión del óvulo y el espermatozoide. Se realiza una cirugía donde se coloca una ligadura sobre la trompa sellándola, en ocasiones se corta la trompa. No se alteran el resto de las funciones del aparato reproductor. Método con efectividad del 100%
Implante Histeroscópico: procedimiento que consiste en la colocación, vía vaginal, de un pequeño dispositivo, con forma de resorte, dentro de cada una de las trompas de Falopio. Una vez colocados los dispositivos, el tejido corporal crece en su interior bloqueando las trompas de Falopio e impidiendo que los espermatozoides lleguen al óvulo. Se realizará una visita de seguimiento a los tres meses para comprobar la oclusión tubárica y se deberá utilizar otro método anticonceptivo durante este período. Método altamente eficaz en un 99.8%
Vasectomía: Es un método para la esterilización permanente en el hombre, es un procedimiento quirúrgico donde se cortan los conductos deferentes impidiendo que el espermatozoide salga. Es considerado método irreversible, pero con las técnicas de recanalización actuales se consigue la reversibilidad en un 40% de los casos. Su efectividad es del 96-100%
Ahora ya conoces un poco más de métodos de planificación familiar, si quieres conocer y entender más no dejes de leer las siguientes partes de éste interesante y extenso tema.